La pequeña nación de Asia Central se ha subido a la fiebre por las criptomonedas y en
los últimos años logró montar un importante sector dedicado a su minería. Luego de
las políticas que prohíben dicha actividad en China, muchos ahorristas e inversores
volcaron su interés en este sorprendente país. ¿De qué se trata este fenómeno? ¿Puede
implementarse algo similar en otros países? A continuación, todo lo que necesitas
saber al respecto.
Sin ningún tipo de lugar a dudas, la presencia de las monedas digitales en los medios de
comunicación es sorprendente. Eso se debe, claro, a que también se encuentra presente en
la vida cotidiana de miles y miles de inversores y ahorristas que se han volcado a este
nuevo mercado que desde su nacimiento en 2009 no ha parado de crecer en todas partes del
mundo.
En ese sentido, acciones como vender Bitcoin o minar criptomonedas –términos que hace
algunos pocos años nos hubieran parecido increíbles o poco verosímiles-, hoy forman parte
del ABC de cualquier joven interesado en el mundo financiero. En ese sentido, podemos
conocer el sorprendente caso de Kazajistán, una pequeña nación asiática cuya vida cambió
gracias a las monedas digitales.
Todo comenzó cuando el imponente vecino de Kazajistán, China, decidió de forma
intempestiva prohibir la minería de criptomonedas en su país. Como consecuencia natural
de dicha medida, los mineros e inversores decidieron migrar sus movimientos y acciones al
pequeño país de Asia Central, lo que derivó en una industria vinculada a las criptomonedas
más que pujante y sorprendente.
Hoy en día, Kazajistán ocupa el segundo lugar mundial en lo que a criptomonería se refiere,
de acuerdo a un informe de la BBC de Londres. En ese sentido, Moldir Shubayeva, una de
las representantes de los “criptoempresarios” de dicho país declaró al medio inglés que ha
dedicado cuatro años de su vida casi exclusivamente a este trabajo y que los rendimientos
han sido sorprendentes. En ese sentido, pasó de minar criptomonedas en su casa junto a su
hermano a montar su propia central minera con el fin de alquilarle espacio a clientes.
Como es sabido, la criptomonería es el proceso por el que se obtienen muchas monedas
digitales, entre las cuales encontramos a las más importantes del mercado, como es el caso
de Bitcoin o Ethereum, por ejemplo. Además, si bien esta suerte de dinero digital no posee
respaldo de instituciones o bancos, se basan en la verificación de ordenadores y usuarios
privados en red.
Ahora bien, dicha operación es más que complicada, por lo que se requiere una capacidad informática elevada y, por ende, un gran consumo de energía. Como recompensa, el usuario obtiene criptomonedas. Kazajistán ocupa hoy en día el segundo lugar, detrás de Estados Unidos, en lo que a criptominería se refiere, llegando a contribuir en el 18% de la red global. ¿Podrán otros países imitar este ejemplo? La creación de energías renovables para tal fin puede ser el futuro del sector.